DECLARACIÓN DE LA ACADEMIA NACIONAL DE EDUCACIÓN
acerca de la necesidad de alcanzar un acuerdo nacional
Buenos Aires, 5 de julio de 2021
Las conductas y las ideas que se expresan en la sociedad crean, mediante el ejemplo, el clima que influye de manera decisiva en la conformación de los valores que guiarán la vida de sus integrantes. En la Argentina actual, esta «educación social», contribuye a hacer muy difícil la «educación formal», la tarea de enseñar y aprender que se lleva a cabo en la escuela. En el ambiente que nos rodea se advierte la incapacidad para superar los antagonismos que dificultan la convivencia e impiden resolver la alarmante pobreza, así como las graves desigualdades que se observan en el país, en especial entre sus niños y jóvenes. Es muy difícil educar en medio de tanta pobreza y de tanta confrontación estéril.
Por esa razón, ante la profunda crisis que atraviesa la Argentina – producto de un prolongado proceso histórico caracterizado por frustraciones y desencuentros, y agravada por la pandemia – la Academia Nacional de Educación, cumpliendo con su misión de velar por la educación, tanto la formal como la social, advierte acerca de la urgencia de alcanzar un acuerdo nacional sobre las cuestiones más críticas. Este debería estar orientado al bien común, privilegiando la educación y destacando su vínculo con el futuro noble de la Nación. Pero ese acuerdo sólo se logrará al cabo de un diálogo abierto y franco entre todos los sectores sociales, dejando de lado enfrentamientos estériles y reafirmando nuestra vocación patriótica por un estilo democrático de vida, plural, respetuoso de la diversidad de opiniones, honesto y cuyas propuestas contemplen la integridad del ser humano.
En esta crítica circunstancia histórica, la Academia Nacional de Educación considera que el presente y el futuro de la Argentina como nación, y por ende de nuestra educación, dependen de ese acuerdo nacional que logre que esta sociedad dividida busque incluirnos a todos. Por ello exhorta a los habitantes de nuestro país, especialmente a quienes ejercen responsabilidades políticas, a reflexionar sobre la necesidad de crear el ambiente social propicio para la formación de los niños y los jóvenes. Esta «educación social» resulta clave no solo para las nuevas generaciones sino también para el destino de nuestra patria
POR EL PLENO,
José María La Greca
Académico Secretario